Tres nuevos galardones reconocen el periodismo social de EL PAÍS

• Ana Torres, Noor Mahtani y José Ignacio Martínez Rodríguez han sido galardonados por dos reportajes sociales sobre la infancia.
• El diario también ha recibido el premio del Consejo General de la Psicología en España

EL PAÍS ha recibido tres nuevos galardones, todos ellos reconocen la labor de un periodismo social.

La historia de Saúl y José Luis, dos niños con problemas de desarrollo, ha recibido el ‘Premio Tiflos’ de la ONCE en la categoría de periodismo digital. El reportaje ‘El abismo entre Saúl y José Luis: la brecha autonómica en las ayudas para niños con problemas de desarrollo’, denuncia la brecha autonómica del servicio de atención temprana, destinado a niños de cero a seis años con dificultades en el desarrollo.

El jurado de este galardón ha destacado la dedicación de las dos autoras, Ana Torres y Noor Mahtani, a la pieza publicada el pasado mes de octubre en la sección de Educación de EL PAÍS. La institución también valoró la “redacción detallada y precisa que une datos e historias personales”.

El Consejo General de la Psicología en España (COP) ha premiado al diario ‘por su contribución a la difusión e impulso de la Psicología’. La directora adjunta de EL PAÍS, Eugenia de la Torriente, ha sido la encargada de recoger el galardón en el V Congreso Nacional de Psicología, un evento que ha contado con la participación de 1.900 profesionales cuyo objetivo ha sido recordar la necesidad de dotar de más recursos públicos a la salud mental.

En cuanto al reconocimiento internacional, el periodista José Ignacio Martínez Rodríguez se ha hecho con el ‘Premio Luchetta 2021’ por su tema ‘Compraventa de niños para pescar, tareas domésticas o prostitución’, publicado en Planeta Futuro, sobre la trata de menores. El objetivo de este galardón es concienciar a las instituciones y ciudadanos sobre los derechos de los niños amenazados en todas partes del mundo.

El trabajo de José Ignacio analiza la situación que viven muchos niños y adolescentes de los países africanos que acaban realizando trabajos forzados o como esclavos tras el intercambio de sus familias por la promesa de un futuro mejor para ellos que nunca llegó.