La ministra de Defensa, Margarita Robles, participa en ‘Diálogos para la seguridad. Foro del Sur sobre Geopolítica y Defensa de la Paz’, organizado por EL PAÍS

• El evento se llevó a cabo este lunes en el Museo Reina Sofía de Madrid
• Contó con la intervención de Marc Murtra, presidente de Indra; Amparo Valcarce, secretaria del Estado de Defensa; y Nasser Kamel, secretario general de la Unión por el Mediterráneo, además de profesionales con una amplia experiencia en sectores como las relaciones internacionales o la tecnología militar

Este lunes se ha celebrado, en el Museo Reina Sofía de Madri, ‘Diálogos para la seguridad’, un foro organizado por EL PAÍS y centrado en la geoestrategia, la guerra, la defensa y la paz. La directora de EL PAÍS, Pepa Bueno, fue la encargada de inaugurar la jornada, a la que también acudieron expertos como la ministra de Defensa, Margarita Robles, encargada de clausurar el acto; u otros profesionales secretario general de la Unión por el Mediterráneo (UPM), Nasser Kamel, o la secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce.

Bueno manifestó en su discurso de apertura la “vocación de continuidad, ambición y expectativa de crecimiento” del foro. La directora de EL PAÍS destacó el papel de los medios de comunicación a la hora de configurar unas opiniones públicas “constructivas y fundamentadas”: “Entre los nuevos desafíos que enfrenta tanto España como el resto de Europa, la desinformación ocupa un lugar central”. Añadió, además, que “pone en juego la confianza en las instituciones y en la política, que son los pilares de las sociedades democrática”.

Los recientes resultados en las elecciones de Estados Unidos estuvieron muy presentes en la jornada. El presidente de Indra, Marc Murtra, se mostró convencido de que el cambio de presidente en favor de Donald Trump no alterará el rumbo de la política exterior del país, pero admitió que puede “acelerar el ritmo”. En la entrevista en la que participó dejó clara la vocación de Indra por estar alineada estratégicamente con el Ministerio de Defensa y “ayudar a gestionar los grandes programas tecnológicos”. Murtra añadió que su empresa aspira a ser “el gran coordinador nacional de la industria de la defensa”.

La secretaria de Estado de Defensa, Amparo Valcarce, trató de contrarrestar las críticas por el hecho de que España esté a la cola de los países de la OTAN en porcentaje del PIB en gasto militar, subrayando que es uno de los aliados que más destina a las misiones en el exterior. Valcarce calificó la industria española de defensa de “activo estratégico” y aseguró que genera el 5,7% del empleo industrial y que este se caracteriza por su alta cualificación y productividad.

La sesión de tarde comenzó con la intervención grabada de Javier Colomina, representante especial de la OTAN para el flanco sur, quien explicó las medidas de la organización en el Norte de África, el Mediterráneo y el Sahel, las cuales son “más que nunca una prioridad”.

El secretario general de la Unión por el Mediterráneo (UPM), Nasser Kamel, advirtió de las consecuencias para Europa de la guerra de Gaza. “Si Europa se toma en serio la autonomía estratégica, deberá tener un enfoque autónomo del conflicto palestino-israelí. No debería quedarse como un observador pasivo, su seguridad está ligada a la del Mediterráneo. Tiene medios políticos y económicos para actuar y debe hacerlo por su propio bien”, advirtió.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, fue la encargada de clausurar el encuentro. Durante su intervención denunció que ya se han abierto grietas en la Unión Europea sobre el apoyo a Ucrania y que algunos países abogan de manera abierta por “acabar la guerra a cualquier precio”, lo que supondría “ceder ante Putin”. La ministra reveló el debate que mantuvo con sus homólogos europeos en Bruselas el pasado día 19; el primero tras la victoria electoral de Trump. “Me preocupa lo que viene”, reconoció Robles, que reiteró la posición española de mantener el apoyo sin fisuras a Kiev hasta lograr “una paz justa y duradera”.

El evento fue organizado por EL PAÍS en colaboración con el Ministerio de Defensa y la consultora Thinking Heads. Contó con el patrocinio de las empresas Escribano Mechanical Engineering, GMV, Hispasat, Indra y Navantia.

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